A veces siento que me muero, decaigo y solo sollozo entre fúnebres lodazales de vida inerte para intentar aplacar así mi dolor. Meto la cabeza en el barro y cuento hasta 1000 para que se escape todo el aire en mi pecho y con él mi corazón.
Es cierto, soy un dramático, soy un rey victimísta cuyo trono perdido sigue estando donde estaba.
Me rindo en las profundidades de mi hermoso océano por el mero hecho de creer que no puedo nadar en él, que no me dejan respirar y que jamas me ayudaran a flotar.
Pero aun así mi irracionalidad nada a la costa y me dice... "Seyo, despierta... estás en tierra". Es entonces cuando camino sobre las aguas y me zambuyo en sus olas de energía y disfruto de la vida. Soy persona.
Así es, me repito cada día... Estoy vivo, aun respiro.
x.o.x.o.
